En Suecia, Kuller y Lindsten (1992) analizaron en las aulas
los efectos de la luz natural versus luz generada por tubos de fluorescentes.
Su estudio determinaba la influencia de estos tipos de luz en la producción de
hormonas del estrés, el desarrollo corporal y enfermedades de los alumnos
durante todo el curso escolar. Los resultados indican que los niños situados en
una clase sin luz natural tienen alteraciones en el patrón básico hormonal, y
esto a su vez influye en la capacidad de los niños para concentrarse y
cooperar. Además, con el tiempo, la falta de luz natural puede afectar al
crecimiento con un marcado retraso crono-biológico y a contraer enfermedades
escolares. Para estos investigadores, es necesario seguir estudiando los
efectos de la luz natural y la luz artificial.
Efectos de la luz Desde hace tiempo se conoce que la luz
condiciona la agudeza visual y la percepción del color. La luz ejerce efectos
en una amplia gama de funciones biológicas y de comportamiento. Se sabe también
que su ausencia influye negativamente sobre el estado de ánimo y afecta a la
capacidad del cerebro para procesar la información. En los seres humanos, la
luz se relaciona con estados de alerta/vigilia y sus efectos influyen en los
ritmos circadianos, aunque se le ha prestado escasa atención.
La
iluminación a la que estamos acostumbrados en nuestros entornos de actividad
suele ser monótona e insuficiente. Podría producir falta de atención,
desánimo y depresión, incrementando el estrés y la fatiga. El uso de una luz
más colorida, dinámica y brillante puede contribuir a un estado de ánimo más
positivo. Los autores sugieren que, en el futuro, las investigaciones acerca de
la luz y el color se tengan en cuenta para la construcción de edificios más
saludables.Los resultados de una prueba de comprensión lectora
son aún más llamativos: la frecuencia de errores se redujo a un 45%.
Otro estudio realizado en 1999 (Heschong, Wrighty Okura, 2002) con 21.000
estudiantes estadounidenses descubrió que aquellos que recibieron las clases en
aulas con más luz natural obtuvieron resultados hasta un 25% más altos en los
exámenes estándar que otros estudiantes en el mismo distrito escolar.
Con todos estos datos,
pensamos que una iluminación dinámica y adecuada al ritmo biológico y de
aprendizaje de los niños de 11 años puede influir en el comportamiento
emocional y cognitivo, ayudarles a procesar la información y las
funciones mentales, sobre todo medidas en rapidez y comprensión lectora,
motivación y nivel de concentración mental.
http://www.lucescei.com/uploads/tx_ztdownloads/Iluminacion_escolar_Philips_Uni_Nebrija.pdf
http://www.estiluz.com/es/blog/iluminacion-y-lectura-tenemos-puntos-de-luz-adecuados
Recopilador: Yasmin Huaman Taquila
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